TRATAMIENTO DEL CÁNCER (PARTE 2)

4ª CONSIDERACIÓN TERAPÉUTICA: ELIMINAR LA ACIDEZ.   

Calmar la rebelión mejorando la nutrición celular, eliminando el CLUSTER o Flema que impide el intercambio de sustancias nutrientes y oxígeno, reteniendo el CO2 de la combustión celular y acidificando el medio extracelular.

Existen infinidad de propuestas y protocolos naturistas dirigidos a reducir la acidez del medio extracelular, algunos de indudable interés científico, otros sin base científica pero con evidencias clínica, otros (como es el caso de la MTCH.) en los que subyace un profundo conocimiento empírico y otros que pueden ser puestos en duda o que han actuado de una manera individual sin sustentarse en ningún tipo de casuística y/o soporte racional o metódico.

El Ph. de la sangre es un número cósmico que refleja los días de la semana y los días del año (7,365), con un margen de tolerancia que contempla los solsticios, equinoccios y las fases lunares, pudiendo fluctuar en función de la luna (+ 0.012 meses del año y + 0.028 días del mes lunar (lo que nos puede dar una banda entre 7.365 y 7.405).

Ya en el año 1931 el Dr. Otto Heinrich Warburg recibió el Premio Nobel por descubrir la causa primaria del cáncer comentó: ”Una alimentación antifisiológica basada en alimentos acidificantes y sedentarismo crea en nuestro organismo un entorno de acidez. La acidez, a su vez, expulsa el oxígeno de las células”

En su obra “El Metabolismo de los tumores” demostró que todas las formas de cáncer se caracterizan por dos situaciones básicas: acidosis e hipoxia.

Descubrió que las células cancerosas son anaerobias y no pueden sobrevivir en presencia de niveles de Oxígeno biológicos normales. Sobreviven gracias a la Glucosa siempre que el entorno esté libre de O.

Según esta propuesta el cáncer es un mecanismo de defensa que desarrollan ciertas células para sobrevivir en un entorno ácido y carente de O.

Los procesos hiperplásicos precisan de mucha energía para poder desarrollarse y por tanto precisan de grandes cantidades de glucosa, Por ello en las pruebas termográficas por emisión de positrones (PET) se evidencia la concentración de glucosa ingerida en las áreas hipermetabólicas que se corresponden anatómicamente con el tumor

Popularmente se suele decir que el cáncer le puede tocar a cualquiera, ese pensamiento es fruto de la ignorancia y el fatalismo.

Según el Dr. George Cril: “Es imposible que un cáncer proliferen en un organismo que haya eliminado la acidez; evite los alimentos que lo producen, oxigene el organismo con un adecuado ejercicio físico y respiratorio, hidrátese convenientemente y estará previniéndolo.

El Dr. Theodor Barod da título a su obra cumbre “alcalinizarse o morir” a una serie de medidas dietéticas e higiénico ambientales para lograr ese objetivo.

El Dr. Robert Yong asegura “El exceso de acidificación del organismo es la causa de todas las enfermedades”

Ya Hipócrates, muchos siglos antes de conocerse la bioquímica, afirmó “que el alimento sea tu medicina y que la medicina sea el alimento”.

En el año 1900, una de cada 20 personas desarrolló cáncer. En 1940 una de cada 16. En 1970 una de cada 10. Hoy una de cada 3. El sentido común nos dice que existe una relación directa entre lo que comemos y como enfermamos y no precisamente en su aspecto cuantitativo sino en el cualitativo. En las hambrunas se podrá morir de anemia pero difícilmente de cáncer.

En base a mi experiencia como paciente que ha tenido que investigar múltiples aportes sobre el tema, propongo, de una manera sucinta y general, unas recomendaciones dietéticas dirigidas a reducir acidez.

Por supuesto no se agotan aquí las infinitas propuestas terapéuticas ligadas al aspecto dietético, pues todos los días se descubren nuevas propiedades anticancerígenas en los componentes esenciales de los alimentos naturales, a la par que se descubren sustancias cancerígenas en los alimentos procesados industrialmente. 

5ª CONSIDERACIÓN TERAPÉUTICA: DIETO TERAPIA.

ALIMENTOS ABSOLUTAMENTE PROHIBIDOS.

Dulces industriales sobre todo el azúcar refinado.

Bollería industrial.

Transgénicos sobre todo los derivados del trigo.

Alimentos de origen animal no ecológico.

Alimentos tratados con compuestos químicos (edulcorantes, conservantes, aromatizantes, etc.).

Todo alimento tratado con microondas.

Aceites sobrecalentados repetidas veces.

ALIMENTOS RESTRINGIDOS (Máximo 20% de la dieta).

Dulces derivados de la miel, fructuosas y caña ecológica.

Leches vegetales no transgénicas.

Huevos y proteína animal lo más ecológica posible.

Refinados sobre todo las harinas de cereales.

Conservas vegetales y animales que no contengan aditivos químicos.

Vegetales y verduras cocidas.

ALIMENTOS PERMITIDOS.

Frutas y verduras crudas y de temporada (conservan la energía biótica, potenciadora del sistema inmune).

Aceites vegetales ecológicos sobre todo oliva y coco.

Cereales integrales y no transgénicos sobre todo el mijo.

Frutos secos sobre todo la almendra y la nuez.

Semillas de diversos vegetales.

ALIMENTOS RECOMENDADOS EN SINDROME TUMORAL.

Brócoli, cúrcuma, semillas de albaricoque, aloe Vera, té verde, algas chlorella, remolacha, zanahoria y todos los bulbos comestibles, alimentos fermentados, Vitamina C., Vitamina D., Aceites de Krill Omega 3 y 6.

6ª CONSIDERACIÓN TEPAPÉURICA: EVITAR RADIACIONES ELECTROMAGNÉTICAS DE ALTA FRECUENCIA Y DESCONTROLADAS.

Mejorando el hábitat tanto laboral como personal sobre todo el nocturno. Incorpore agentes vivos a su habitación (madera, plantas con una adecuada ventilación, animales, prendas de cama no sintéticas, ionizadores, fuentes y acuarios, etc.) capaces de compartir y diluir la carga electromagnética en que se han convertido las habitaciones sobre todo de los niños y adolescentes.

7ª CONSIDERACIÓN TERAPÉUTICA: EVITAR EL CONTACTO CON SUSTANCIAS TÓXICAS.

Inhalaciones nocivas como el CO2, buscando el mayor contacto posible con las energías de la naturaleza en forma de iones negativos (mar, parques, cascadas, ríos, etc.).